ITALIA 2014 (1): La Toscana

Este año hemos decidido ir cerquita de vacaciones, vamos a Italia, a la Toscana y Dolomitas, como dice una compañera mía, eso para ti, es como ir al pueblo, ella lo decía por la cercanía, comparando con otros destinos a los que hemos ido, pero luego resultaría ser una premonición, la Toscana me ha parecido como ir al pueblo, a cualquier pueblo de España sin tener que ir tan lejos, la verdad.

Yo no es por desilusionar a nadie, cada uno tiene sus sensaciones, el paisaje es bonito, los pueblos también, la zona es tranquila, pero nada me impactó ni me emocionó, todo "bello" (con acento italiano) pero no maravilloso. Supongo que otros viajes que hemos hecho pesan todavía en nuestra memoria.
En la segunda parte del viaje fuimos a Dolomitas que eso si que dejó emociones en nuestra retina.
Estuve en Italia hace ya muchos años y en otras condiciones, cuando tenía 20 años, en un circuito organizado, de esos que ves un país entero en 15 días, y que me hizo odiar los viajes organizados para siempre, luego he visto muchos otros lugares, así que quería descubrir cuanto cambian las cosas con los años, con la edad y con un presupuesto un poco más amplio. :) 

Había que decidir la zona de Italia,  todo el mundo hablaba maravillas de La Toscana, como una zona que enamora, paisajes idílicos y pueblos que no te dejan indiferente, por regla general no suelo coincidir mucho con la mayorías, así que cuando mucha gente me dice que algo es fantástico, me produce cierto miedo, me hace dudar, en fin, no sin cierto escepticismo,  decidimos meter La Toscana en nuestro itinerario.

Según estuve viendo en Internet, fotos, comentarios y demás, La Toscana no nos iba a dar para mucho, por lo que pasar una semana completa ya me estaba pareciendo demasiado, pero muchos agriturismos alquilan de sábado a sábado y nos pareció una buena opción alojarnos en ellos,  así que no iba a quedar más remedio y luego buscar otro destino que no estuviera muy lejos y que se adaptara más a nuestros gustos viajeros.

Jose tenía muchas ganas de hacer Dolomitas después de ver unas cuantas fotos de la zona decidimos que esa sería la segunda parte de nuestro viaje, por si los paisajes de la Toscana no nos llenaban lo suficiente, los de Dolomitas seguro que si, en el camino pararíamos a ver Venecia, pues mi hermana nunca había estado en Italia y esta es una ciudad que hay que ver, una vez que la has visitado despierta amores u odios, pero hay que conocerla para juzgarla.

La Toscana nos condicionó a elegir el mes de Junio para nuestras vacaciones, porque otra de las cosas que se contaba en los foros, es que en pleno verano hace un calor impresionante y eso me produce otro gran rechazo, calor, mayorías, pueblos llenos de tiendas de souvernirs,…..uffffff miedo me está dando, pero voy a ser valiente y veremos si La Toscana consigue enamorarme.


Este viaje lo haremos como siempre los tres viajeros incansables, mi marido, mi hermana y yo, así que empiezo a mirar como es más sencillo y más barato llegar.

Sale un ferry desde Barcelona a Livorno, que no está muy lejos de la zona de la Toscana a la que vamos, así que no es una mala opción y así podemos llevar nuestro coche nuevo, no hacer tantos kilómetros y no tenemos que alquilar.

La otra opción sería ir a Pisa en avión y allí alquilar un coche. Pero esta es bastante más cara.

Y la tercera opción, que al final es la que elegimos, sería ir desde Bilbao con nuestro propio coche, la única pega es la cantidad de kilómetros que hay que hacer, pero Jose, que es el conductor, dice que a él no le importa, y a pesar de la cantidad de peajes franceses e italianos y los precios que tiene el gasoil en esos países, nos sale mucho más barato y es más cómodo porque no dependes de horarios de aviones, ni de barcos, ni de nada ni de nadie.

Y ya está bien de charlas, empezamos una nueva aventura 

Viernes 20 de junio de 2014 - Bilbao – Aix en Provence. 

Como la distancia entre Bilbao y La Toscana son unos 1400 km, y nos parecía mucho para hacer de un tirón,  decidimos buscar un punto intermedio para hacer la primera noche.

El google maps nos lleva por la Costa Azul y decidimos alojarnos en Aix en Provence, este pueblo está a 824 km de Bilbao y se tarda unas 7h y media, no está mal para descansar el primer día de ruta. En Francia hay muchos alojamientos a las afueras de las ciudades que son muy baratos, no es nada maravilloso, pero son funcionales y limpios, son las cadenas de Formula 1, Ibis, y demás. Nosotros elegimos un Formula 1 que no estaba muy mal situado, eso sí, te tienes que mover con coche, pero la habitación doble son 35 euros, por ese precio no puedes pedir mucho, la única pega es que en este, el baño era compartido, no me di cuenta al reservar, pero hay muchos que tienen un  pequeño cuarto de baño en la habitación con ducha, que es más cómodo.

Esta es la cadena que lleva alguno de este tipo de hoteles por si queréis mirar precios. Accorhotels

No madrugamos mucho, conseguimos meter las maletas en el coche y ponemos rumbo a Italia, no sé por que, el viaje de ida siempre se hace más corto que el de vuelta, a pesar de las casi 8 horas que tardamos, no se nos hizo muy pesado, encontramos sin muchos problemas el F1 en el que íbamos a pasar la noche, hicimos el check in y nos fuimos a visitar la ciudad, eran más o menos las 6 de la tarde.


Aix en Provence es una bonita ciudad francesa, en verano con mucho ambiente, todo su centro está lleno de terrazas con mucha gente, además , no me acuerdo que partido del mundial echaban, porque yo no soy muy futbolera, y menos si estoy de vacaciones, pero todo el mundo estaba muy emocionado viendo el fútbol en grandes pantallas en todas las terrazas.

Hay una calle principal que se llama Cours Mirabeau con bonitos edificios señoriales, y por detrás de esta calle están todas las callejuelas del centro llenas de comercios y mucho ambiente. 
Cenamos en una de esas terrazas, nada reseñable, la verdad, pero se estaba a gusto. 


Sábado 21 de junio de 2014 - Aix en Provence – Agriturismo La Toscana 

Hoy teníamos otros tantos kilómetros hasta llegar al agriturismo, pasábamos toda la Costa Azul, pero desde la autopista no se apreciaba nada maravilloso en esa Costa, que supongo que lo habrá, o no? Muchos edificios y poca cosa más, igual está un poco masificada, bueno tampoco voy a juzgarla, porque casi no vimos nada. Pero tampoco creo que sea de mis destinos estrella.

Eso sí, nos tragamos unos cuantos atascos, supongo que lo normal un sábado, en verano, en dirección a cualquier playa del mundo, pero se nos hizo un poco pesado pues teníamos muchas ganas de llegar.


Después de unos 600 km y más o menos unas 7 horas llegamos a nuestro agriturismo.

La recepción estaba en Diacceroni así que nos dirigimos allí para recoger las llaves, que ya nos costó encontrarlo, nos recibió Maxi, un tipo muy simpático con el que hablamos entre italiano, español e inglés y que nos acompañó al otro alojamiento, por esa pista que no nos atrevimos a coger porque nos parecía un poco de tractores, pero Maxi vio que nuestro coche era un todocaminos y que no tendría problemas para llegar, así que nos fiamos de él y cambiamos el color de nuestro coche de blanco a color arena. 

Se llama Agriturismo Diacceroni, y es una gran casa de campo en medio de la campiña toscana, a unos 30 km de Volterra, uno de los pueblos que hay que visitar, nosotros no encontramos sitio en este alojamiento que es como la base central, pero luego tienen varias casas rurales parecidas repartidas por las colinas toscanas, cuando reservamos tenían alojamiento en el Agriturismo Pelagaccio, era un poco mas vieja que la anterior pero también parecía más tranquila, tienes 3 cenas-partys incluidas en el alojamiento, el sábado, cuando llegas, te hacen una barbacoa, el martes party-pizza y el jueves, party - pasta, estas cenas se hacían en Diacceroni aunque no estuvieras alojado allí. Las casas se comunicaban por un camino sin asfaltar que hacía que pegaras unos cuantos botes y que pusieras el coche perdido de arena, pero era muy rural.

Por supuesto en estos alojamientos nada de español, estaba lleno de holandeses, así que nos entendíamos como podíamos.


La casa era bonita, sobre todo la zona de la piscina, porque la casona era el típico caserón de pueblo, muy grande, pero un poco viejo, me pareció mucho más bonita Diacceroni, pero bueno, aquí tenía pinta que estaríamos a gusto. Por dentro también era grande.

Era mas o menos las hora de cenar, la Welcome Party era a las 7 pm, así que después de dejar las maletas nos dirigimos otra vez a Diacceroni donde nos sorprendieron con una cena de recibimiento increíble, música, canapés, pasta, carne a la barbacoa, ensaladas, impresionante, y un sitio muy agradable, la bebida no estaba incluida pero podías comprar el vino que producían ellos mismos de sus viñedos y no era muy caro o cualquier otra bebida.




Estuvimos muy a gusto. Ah, se me olvidaba para los que no quieran desconectar del todo del mundo, en Diacceroni si hay wifi, pero en Pelagaccio no, así que cuando queríamos conectarnos teníamos que venir aquí a tomar una cervecita. Tenían un grifo que salía muy rica, así que teníamos una buena excusa. 

Después de la fiesta nos fuimos a ver las bonitas puestas de sol de la Toscana. Creo que los extranjeros saben vender mucho mejor que nosotros sus países. Por ahora no he visto nada que no haya visto antes en muchos lugares en España. 


Domingo 22 de junio de 2014 - Montalcino - Abadía de St. Antimo – San Quirico d´Orcia – Bagno Vignoni – Pienza – Montepulciano 

Esta ruta se supone el destino estrella de la Toscana, y la verdad es que es de lo mejor, pueblitos medievales, colinas cultivadas de algún cereal, ya de color amarillo por la época, un camino hecho con cipreses y en la cima de la colina un agriturismo, y grandes campos de viñedos. Las típicas fotos de la Toscana. 

El primer pueblo que visitamos es Montalcino, el camino se nos hizo un poco largo, hay unos 100 km pero se tarda casi 2 horas. 

Es un pueblo subido a lo alto de una colina, con muchas tiendas para turistas, que venden vino y souvenirs, pero el pueblo es bonito, con su iglesia, su fortaleza y agradable para un paseito por su calles. Aquí nos tomamos nuestro primer Spritz, una bebida que los italianos toman como si fuera cerveza, para el aperitivo, de color naranja o rojo según combinen con Aperol o Campari, y vino seco blanco. 








No muy lejos de aquí, a unos 10 km, se encuentra la Abadía de St Antimo, rodeada de viñedos, una antigua abadía cisterciense. Un lugar muy especial, muy recomendable, no sé si es por la paz del lugar, por lo menos cuando nosotros fuimos, supongo que en Agosto, y llena de turistas perderá ese encanto




Nos dio la hora de comer, así que al salir de la zona donde estaba la abadía vimos una terraza con una pizzeria que tenía buena pinta se llamaba Locanda S. Antimo, y allí comimos, bastante bien, la verdad. Nuestro primer plato de pasta :), yo tomé unos pici all´agliata, los pici es una pasta típica de La Toscana, luego ya no la vi en ningún sitio, pero que estaba muy buena. Eran alargados como los spaghettis, pero más blanditos, como hechos a mano.

Después de comer nos fuimos a San Quirico d´Orcia a unos 25 km de aquí, más o menos, media hora. Más paisaje toscano, y más pueblo en una colina. 

Tiene una bonita colegiata y había una fiesta medieval, mucho ambiente, y gente bailando con estandartes.







Bagno Vinogni, también está cerca, a unos 8 km. El pueblo no tiene nada especial, pero en la plaza hay una preciosa piscina de agua termal que merece la visita. El baño está prohibido, supongo que será porque a la salida del pueblo hay un gran complejo tipo resort con piscinas termales, o sea previo pago. 


Otros 15 km, más o menos media hora y llegamos a Pienza, la ciudad renacentista de Pio II, a quien pueda interesar, para mi, otro pueblo en una colina, paseito y vistas de la campiña toscana. 




Y a unos 15 km de aquí llegamos a Montepulciano, no os lo vais a creer pero es un pueblo en lo alto de una colina, con vistas espectaculares de la tierra Toscana. 


Esta en un recinto amurallado, dejamos el coche en un parking al lado de una iglesia, parece que aquí también están de fiestas, han hecho un mural con tapones de botellas. 


Empezamos a subir, que no os había dicho pero esto es lo malo de estos pueblos en altos de colinas, que el aparcamiento suele estar a la entrada del pueblo, abajo, y por supuesto todos previo pago, y luego, subes y subessss y subesssss.



Y al final de la cuesta, al final, al final, está la Piazza del Duomo, rodeada de palacios y bonitas fachadas.





Después de un paseo por sus calles, subiendo y bajando, nos volvemos hacia nuestro agriturismo que todavía tenemos un par de horas de vuelta.

Como se nos hace tarde y no queremos quedarnos sin cenar, que hemos hecho mucho ejercicio, paramos en Colle di Val d´Elsa, una gran plaza con algunos restaurantes nos hace decidirnos por una terraza en L´Antica Trattoria, un sitio muy agradable, la verdad, allí probamos el famoso Bistec a la fiorentina, ¿que puedo deciros? Que somos de Bilbao...... y como el chuletón de aquí....... J

Lunes 23 de junio de 2014 - Volterra-San Gimignano-Certaldo

Volterra no estaba muy lejos de nuestro agriturismo, más o menos a 30 km como unos media hora, aunque por estas carreteras se hacen bastante más largos los kilómetros.

Ya no sé muy bien que contar de los pueblos de la Toscana para que no os parezca muy repetititivo.... pueblo encantador....encaramado en lo alto de una colina....bonitas vistas del campo toscano....magníficos edificios de piedra....tiendas de souvenirs.... 

Tuvimos suerte de aparcar en un parking de pago en lo alto de la colina, así que esta vez no subimos muchas cuestas, nada más salir del parking hay muchas tiendas de alabastro que es la artesanía típica de aquí, a mano izquierda está la plaza del Priori donde está la oficina de turismo por si queréis pedir un plano de la ciudad, pero no tiene mucha pérdida, en la plaza, el Duomo y el Palazzo del Priori, y un poco a las afueras, pero enseguida, se ve el Teatro Romano de la ciudad.











Este pueblo también es famoso porque sale en el libro de la saga de Crepúsculo, en Luna nueva, que os tengo que confesar que me enganchó, incluso he visto las pelis, que como siempre, nada que ver con los libros, si, si, ya sé, me enganchan cosas muy raras, me pasa de vez en cuando, bueno dejemos mis paranoias aparte ☺ el caso es que los seguidores de la saga vienen aquí a ver los rincones donde luego se grabó la peli basada en el libro, pero resulta que no se grabó aquí, sino en Montepulciano, uno de los pueblos que visitamos ayer, como son todos parecidos.☺

Y ahora nos vamos uno de los más famosos de la Toscana, San Gimignano, está como a unos 30 km de Volterra, otra media hora larga. 

Es el pueblo más visitado, así que hay que tener cuidado con las horas a las que se va, porque puede estar abarrotado, una especie de Santillana del Mar, que no sé si conoceréis pero como os pille cuando a todo el mundo le ha dado por ir, pierde mucho el encanto. 


Dejamos el coche a la entrada del pueblo, hay tres parkings concertados, abarrotados todos ellos, lo dejamos en el último, luego hay como un ascensor que te sube un tramo del pueblo, pero luego hay que seguir subiendo y subiendo. 


La subida te lleva a la Piazza de la Cisterna, rodeada de torres y que debe su nombre a la famosa cisterna del siglo XIII que está en el centro. 



En esta plaza se encuentra la más premiada heladería italiana campeona del mundo, "Gelatera di Piazza", helados que no probamos porque eso de hacer cola no es lo nuestro, así que pasamos. 

Seguimos paseando por esta ciudad que es chula a pesar de la cantidad de gente que hay. 





Llegó la hora de comer, así que vamos a ver que encontramos por aquí, por oferta no será, pero todo tan turístico y tan lleno, al final nos decidimos por un ristorante que se llamaba La Bettola del Grillo 2, tenía una terracita agradable, tranquila y apartada del mundanal ruido y comimos bien a un precio razonable, pero sin más. 

Como todavía es pronto para volver al agriturismo nos decidimos por ir a Certaldo, que es un pequeño pueblo que recomendaban porque se subía al casco histórico en funicular, podía estar curioso, estaba a otros 20 minutos de aquí, llegamos al pueblo y menudo cambio, aquí no había un alma, daba hasta miedo pasear por esas calles desiertas, que difícil es encontrar el término medio.

Aparcamos a la entrada del funicular, en otro parking de pago, y subimos nosotros solos hasta arriba. Un casco histórico pequeño y una terracita con wifi en la que nos tomamos un refresco. 




Y ahora si, volvemos para el agriturismo, hoy toca cenar en casita, pero antes subimos a la piscina a ver los últimos rayos del sol. 






Martes 24 de junio de 2014 - (ver siguiente post Florencia)

Cansados de patear la ciudad volvemos al Agriturismo por una carretera que atraviesa el Chianti desde Florencia a Siena. Este valle se considera el corazón de la Toscana, famoso por sus vinos y por lo tanto por sus paisajes de viñedos.

Colinas cubiertas de vides, pueblos medievales como Greve in Chianti, o Radda in Chianti y Castellina in Chianti que a mi no me dijeron nada, pero recomendados en todas las guías de la zona.



Y ahora nos vamos al agriturismo que hoy es martes y toca pizza party, hemos comido pizza, pero bueno, como tampoco tenemos mucha hambre, picaremos algo. Se supone que la fiesta empieza a las 5 de la tarde, ¿de verdad alguien puede cenar a esas horas?, si nosotros casi estamos todavía con la digestión, son las 7 de la tarde cuando aparecemos nosotros, Massi nos ve llegar e inmediatamente dispone una mesa para nosotros y encarga que nos traigan una pizza, puffffff, entera!!! que no tenemos hambre!!!! pero cualquiera le dice, nos traen hasta el postre, unas rosquillas deliciosas, tenemos música y baile, porque a nosotros no nos gustan mucho estos saraos, pero para la gente que le guste esto es genial. :)

Miércoles 25 de junio de 2014 - Cecina - Piombino - Siena

Hoy tenemos ganas de ver la costa italiana, yo traigo hecha la ruta por las Cinque Terre que también está muy recomendado, el recorrido consiste en llegar a La Spezia o Porto Venere y coger un barco para hacer un recorrido por la costa mediterránea en Liguria, más o menos son unos 10 km de costa y la componen cinco pueblos antiguos (Monterrosso, Vernanza, Corniglia, Manarola, Riomaggiore) construidos en la falda de la colina que pende sobre la costa del mar.

Hay que dejar el coche en un parking que cuesta unos 12 euros por 4 horas y luego el ticket que a diario cuesta 26 euros y los fines de semana y festivos 28 euros.

Tenemos dudas porque La Spezia está como a 150 km, unas 2 horas, y ya estamos un poco aburridos de estas carreteras, y no sé......yo ya he perdido la esperanza de que algo me sorprenda por aquí.

Así que al final decidimos irnos a la costa, pero a la más cercana de nuestra casa, a la marina de Cecina. A unos 39 km, 45 minutos. 

Gran error, la verdad, no sé como sería la otra costa, pero esta, es fea......fea.....fea....No tengo ni fotos. 

Cogimos la carretera más cercana a la costa, y fuimos intentando encontrar las playas, nos metíamos como en urbanizaciones, pero nunca conseguíamos ver el mar. Lo conseguimos dos veces, una, en Cecina, que nos encontramos una playa.......rara......con arena ¿? y muchos chiringuitos, eso si. 

Y la otra vez que conseguimos llegar a la playa, esta ya tenía tumbonas y todo fue en Castagneto Carducci, donde logramos comer, en un terraza muy maja, al pie de la playa, un restaurante de pescado, pero sin más. El restaurante se llamaba Zattera 3.0, por si os perdéis alguna vez por esa zona. 

Después de comer seguimos hacia Piombino, esta costa por la que andabamos es la Costa degli Etruschi, para nosotros lo único interesante que vimos fueron los famosos campos de girasoles, tan típicos de la Toscana y que hasta ahora no habíamos encontrado.






Después de recorrernos esos 50 km de costa de Cecina a Piombino, decidimos que en vez de volver por donde habíamos venido, pasaríamos por Siena, y aprovechábamos para conocer la ciudad.

Aparcamos en el parking S.Caterina que está justo al lado de la puerta Fontebranda donde luego coges unas empinadas y largas escaleras mecánicas que te dejan prácticamente al lado de la Piazza Il Campo y del Duomo por lo que te ahorras unas cuantas cuestas, totalmente recomendado.

Nosotros empezamos por la Piazza Il Campo, es una plaza impresionante donde destaca el Palazzo Comunale con su torre del Mangia y rodeada de edificios medievales que le dan un aspecto encantador, en esta plaza es donde se corre la famosa carrera del Palio en la que los equipos vestidos como en el medievo compiten montados en sus caballos. Suele ser en agosto, pero casi mejor que no haya coincidido, no puedo ni imaginar como se pondrá la plaza :)




Ahora nos dirigimos al Duomo, no está lejos de aquí, pero cuesta arriba, eso si.

El Duomo es precioso, con sus rayas de mármol blanco y negro. Pero la fachada.....la fachada es para recrearse durante horas.





Jueves 26 de junio de 2014 - Pisa-Lucca

El día ha amanecido un poco nublado, tiene mal color, hoy nos cae una chaparrada, fijo, bueno, vamos hacía Pisa, a ver Il Campo dei Miracoli, donde está el baptisterio, el Duomo, el Camposanto y la Torre inclinada. 

Tenemos unos 60 km, más o menos una hora de camino, tal como nos temíamos, empieza a llover, llegamos al aparcamiento del Campo dei Miracoli y conseguimos aparcar, aunque está bastante lleno, llueve........llueve mucho........pero bueno, habrá que verlo aunque sea bajo la lluvia, no viene todos los días uno a Pisa.

Así llovía......así.......así......


Este Campo dei Miracoli es muy bonito, impresiona mucho todo el conjunto artístico, ahora hay una fea cadena para que no se pueda pisar el césped, supongo que es lo que traen las masas que arrasan por donde pasan, pero es lo que hay.

No para de llover, nos resguardamos en uno de los edificios, pero no para, así que decidimos irnos a Lucca que está como a unos 20 minutos de aquí, a ver si hay más suerte, y si despeja pues volvemos por la tarde a Pisa.

Lucca es otra bonita ciudad amurallada de estilo medieval, aparcamos fuera de las murallas, en un sitio que parece que se puede aparcar y no hay que pagar, que eso es raro por aquí. Igual cuando volvamos tenemos algún regalito, pero bueno, decidimos arriesgar.


Parece que ha dejado de llover, igual tenemos suerte y podemos patear la ciudad sin mojarnos.

Empezamos a andar por sus calles empedradadas hasta llegar a la Plaza del Anfiteatro, una bonita plaza que está llena de restaurantes con terraza y donde vamos a parar a comer porque ya es la hora.

Comimos en una de ellas, en Da Gherardo, nada especial, pero bien y no excesivamente caro para ser un sitio turístico.


Callejeando llegamos a la Catedral de San Martin (El Duomo)



Seguimos callejeando y llegamos a la Torre y el Palacio Guinigi, una curiosa torre medieval, de las pocas de esa época que todavía se mantienen en pie. Y con encinas plantadas en lo alto. Se puede subir a la torre y ver desde las alturas la ciudad, eso si, por las escaleras.


Nuestros pasos nos llevan a la Basílica de San Frediano, con un bonito mosaico dorado en su portada.


Y después de un bonito paseo por esta bonita ciudad, volvemos a Pisa, que ahora parece que está saliendo el sol y podremos hacer las fotos que queremos.

Esta vez no aparcamos en el parking de la plaza sino por los alrededores que parece que no hay que pagar, o por lo menos eso nos dice un tipo de un bar de por aquí, es raro lo del aparcamiento, no nos ha quedado muy claro en ningún momento y había que pagar o no en la calles. Hay carteles, pero no muy claros.

Volvemos a entrar en el Campo del Miracoli, y ahora sí, hay mucha más gente, claro, pero este sitio tiene una magia especial.








Y nos volvemos para el agriturismo, que hoy toca Pasta Party para cenar, y de nuevo nos sorprenden con el ambiente en Diacceroni, platos de pasta riquísimos y muy buen rollito. 

Y hoy después de todo lo que ha llovido el día nos despide desde el agriturismo con un bonito arco iris.


Viernes 27 de junio de 2014 - Volterra-Peccioli 

Nuestro último día por estas tierras, hoy toca relax que ya hemos hecho muchos kilómetros por aquí. Así que piscina por la mañana y nos vamos a comer a Volterra, a la Trattoria Bada Ganzo que tampoco fue nada del otro mundo, pero comimos. Y dimos una vuelta por Volterra que hoy estaba menos lleno de gente y nos gustó más. 


Por la tarde más relax y salimos a cenar a otro pueblo que no estaba muy lejos de casa en Peccioli, allí cenamos en el Ristorante La Greppia, muy bien, la verdad, un sitio un poco especial y rico, todo muy rico. 

Y ahora dejamos atrás La Toscana y prosigue nuestro viaje.

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